Se impone, más que nunca, el rigor crítico para desvelar falsas legitimaciones, los nexos artificiales que se establecen entre pasado y presente. Por lo pronto, se trata de penetrar en las entrañas de la construcción de los mitos. Estos nacen y mueren en función de lógicas históricas e ideológicas. La misión del historiador es separar el grano de la cizaña. Los mitos no deben ser otra cosa que objetos históricos en sí mismos examinados bajo el prisma de la razón y desde la exigencia de la honestidad. Se trata de demostrar su relativismo histórico, la multiplicidad de lecturas funcionales que ofrecen a lo largo del tiempo y en función de la identidad de sus intérpretes.

Ricardo García Cárcel en La herencia del pasado. Premio Nacional de Historia (2012)

... nuestro destino era PRESTAR ATENCIÓN Y DESCANSAR en cada una de las minúsculas revelaciones que se habían ido abriendo a nuestro paso; cada una de las cuales, a su vez, nos aconsejaba no buscar ningún destino, ni mucho menos un destino feliz. Sólo de ese modo se lucha contra la asfixia y la angustia del tiempo y del dueño de la cortinilla; prestando atención a lo que se ENCUENTRA, y no a lo que se BUSCA.

Félix de Azúa en Historia de un idiota contada por él mismo (1986)

Cuando el saber se especializa, crece el volumen total de la cultura. Ésta es la ilusión y consuelo de los especialistas. ¡Lo que sabemos entre todos! Oh, eso es lo que no sabe nadie!

Antonio Machado en Juan de Mairena (1936)

History has many cunning passages, contrived corridors
And issues, deceives with whispering ambitions,
Guides us by vanities

T. S. Eliot en Gerontion (1920)


lunes, 10 de octubre de 2011

"Narració, argumentació i emoció en el discurs polític"


El pasado viernes 7 de octubre se celebró en la Universidad de Lleida la primera Jornada de Comunicació Política que llevaba por título “Narració, argumentació i emoció en el discurs polític”. El acto estuvo compuesto por dos conferencias y un debate. No pude asistir a la ponencia de Josep Martí Blanch, actual secretario de comunicación de la Generalitat de Catalunya sobre la política vampir, pero sí pude atender a las explicaciones sobre los spots electorales de la profesora de la Universitat Rovira i Virigili Arantxa Capdevila y a la posterior mesa redonda. Estuvo moderada por Josep Lluís Cadena (miembro del Col·legi de Periodistes de Catalunya) y en ella participaron David Miró, subdirector de la sección de política del periódico Ara, Astrid Alemany, consultora de comunicación política y Raimundo Viejo, doctor en Ciencias Políticas y profesor en la Pompeu Fabra. ¿Qué tesis se defendieron y qué conclusiones pueden sacarse de este encuentro?
La doctora en Comunicación Audiovisual Arantxa Capdevila expuso una clasificación de las diferentes tipologías de spots electorales. Al margen de la ideología que pretendan comunicar, se puede inferir que todos tienen en común la construcción de lo que en la teoría de la comunicación se llama mundo posible. Es decir, una narrativa que proyecta de manera verosímil una situación que puede que suceda. Este procedimiento argumentativo se articula en torno a cuatro elementos: el candidato, el partido, el adversario político y la propia realidad. Los ejemplos son claros: los candidatos nos presenta una imagen positiva de su personalidad o nos explica que hará en caso de ganar.
La estrategia a seguir es siempre coyuntural y depende en gran medida de la habilidad para construir una imagen que sepa hacerse con las expectativas de la ciudadanía. La última campaña de Artur Mas para la presidencia de la Generalitat fue efectiva porque supo presentarse como un hombre que había aprendido a gobernar después de seis años en la oposición y se sentía preparado para ganar, tal como pronosticaban las encuestas. Por otro lado, Joaquín Almunia habría sido derrotado en el año 2000 porque su imagen personal fue muy débil y el discurso que adoptó solo buscaba atacar los logros del gobierno de José María Aznar.
Ahora bien, el principal problema con estos anuncios consiste en la disminución del tiempo que disponen para persuadir a su electorado, lo que significa que paulatinamente los mensajes tienden a la trivialización y a la espectacularización. Los argumentos hacen cada vez menos referencia a valores políticos, mientras acuden a situaciones personales. Por otro lado, la desigual repartición del tiempo disponible, basado en los resultados electorales de los partidos, ocasiona que no hay una igualdad en el espacio comunicativo de las televisiones. Desde luego, no permite la pluralidad en la expresión de las diferentes propuestas y perpetua la hegemonía de los partidos mayoritarios.
La mesa redonda entre David Miró, Astrid Alemany, y Raimundo Viejo fue muy intensa, pero debido a la falta de tiempo se echó de menos una conclusión por su parte. La inclusión de un politólogo como el doctor Viejo fue todo un acierto ya que daba un punto de vista alejado de la visión profesional que Miró y el moderador proporcionaban.
Podemos enumerar algunas de estas cuestiones. En primer lugar, se planteó la naturaleza del rol del periodista en la sociedad. ¿Debe sólamente informar o también dar a conocer su opinión en tertulias y columnas? La posición del señor Miró era que este debía esforzarse en adoptar un punto de vista neutral, de carácter casi antropológico. En mi opinión, desde luego que debería ser así. Pero creo que los medios distan de mucho de comportarsede esta forma, probablemente porque adoptar un punto de vista etic (siguiendo la clasificación de Marvin Harris) es tremendamente difícil, cuando se tiene en cuenta que los medios son actores sociales con un protagonismo ineludible.
En segundo lugar, se consideró la desafección de la ciudadanía respecto a la clase política. Para Raimundo Viejo esto es irrelevante. ¿Acaso es una obligación de los ciudadanos ser afectos a su régimen político? En cambio para Astrid Alemany, es necesario que exista una cercanía entre votantes y candidatos, ya que esto es necesario para sostener la legitimidad del sistema democrático. El director de la cátedra y militante de Esquerra Republicana, Miquel Pueyo intervino en alusión a la necesidad de cambiar el funcionamiento de los partidos políticos, que según Viejo sigue anclado en la estructura heredada del XIX. La relación entre partido y ciudadanía quizás sea necesaria flexibilizarla para reparar algunos valores que parecen haberse perdido.
No pudieron dejarse de lado las referencias a los cambios en las tecnologías de la información. La irrupción de Internet y el fortalecimiento de nuevas maneras de sociabilidad y de transmisión de conocimiento han puesto en duda la vigencia de la relación emisor-receptor entendida como una relación vertical. Todos los ponentes concordaban en que el cambio es evidente y que la muerte de los medios unidireccionales es palpable. Ahora bien, ¿que nuevo modelo está apareciendo? Este era el motivo de la discordia.
En el mismo aspecto, se mencionó el impacto del 15-M en la acelaración de la crisis, tanto de la política partidista como de los medios de comunicación tradicionales. El politólogo de la UPF sostenía reiteradamente que el movimiento de los indignados ha supuesto una transformación estructural. Personalmente estoy más de acuerdo con el periodista de Ara, que consideraba que se trata más bien de un síntoma de muchos problemas y que detrás de él asoma un populismo no muy estimulante. Desde luego, el movimiento social Democracia Real Ya pasará a la historia. Sin embargo, dudo que pueda hablarse de transformaciones estructurales en la política partidista. Con toda seguridad ha significado la irrupción de un nuevo actor en el escenario socio-político español, pero no creo que su huella sea tan grande como para trastocar la estrcutura del actual sistema parlamentario.
En resumen, se habló de medios, retórica, política y ciudadanía. Ahora bien, me habría gustado que la jornada hubiese adoptado una mirada un poco más objetiva y distanciada de estas cuestiones. Las conferencias estaban más orientadas a reflexionar sobre los problemas deontológicos de la profesión, y no tanto a comprenderlos como fenómenos sociales. Aunque la inclusión del politólogo Raimundo Viejo fue muy acertada, creo que también habría sido muy correcta la presencia de algún sociólogo o historiador que otorgarse una visión diferente a la de los profesionales de la información.

4 comentarios:

  1. Però, per què escrius en castellà? No serà per arribar a més gent????

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  3. "Anónimo": vaig néixer a Caracas (Veneçuela), i vaig haver d'aprendre el català amb 13 anys, quan vaig venir a viure a aquest país. El castellà es la meva llengua materna i em sento molt més còmode escrivint, llegint i parlant en aquest idioma.
    D'altra banda, em desplaço més pel panorama de les lletres hispanoamericanes, i no tant pel catalano-parlant. Això de cap manera significa que rebutgi el català, que el considero una llengua a reivindicar i amb una preséncia forta i molt ben guanyada. Com podràs veure, la gran majoria d'enllaços que tinc estàn escrits en castellà el que ja indica cap a on tiren els meus interessos i quins són els meus autors de referéncia.

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  4. Aprovo la teva resposta (;P)

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